DANZA como Respuesta a los Milagros de Dios

Si vemos en la biblia, el pueblo de Dios siempre se alegraba, gozaba y celebraba con DANZA como respuesta cuando Dios hacia milagros en favor de su pueblo

Como ejemplo de los muchos que hay en la Biblia podemos ver la Danza de Miriam (hermana de Moises) esta danza fue una respuesta a los milagros de Dios. Él habia permitido que pasaran el mar Rojo, en seco y destruyo a sus enemigos, Asi que Miriam no pudo contener mas su gozo que saco su pandero y junto a las otras mujeres del pueblo de Israel se pusieron a danzar con todas sus fuerzas alabando a Dios por semejante milagro que habia hecho. (Exodo 15:20)

Durante siglos, la danza ha sido un medio universal para las personas de todas las naciones para que puedan expresarse. En Éxodo 15:20, que fue Miriam demostró que la danza es una respuesta natural a los milagros de Dios. Miriam y los hijos de Israel experimentaron los milagros de Dios a través de la división del Mar Rojo. Su primera respuesta fue llevar a las mujeres en el canto y la danza. Su danza era una demostración visual del poder milagroso de Dios. 

Aprovechando esto de Miriam quiero escribir de algo mas, en varios seminarios que tuvimos la oportunidad de enseñar, nos preguntaron hasta los cuantos años se puede ser parte de este ministerio de danza y talvez tu misma te preguntes esto, si nos ponemos analizar un poquito calcularemos la edad de miriam que danzo ese dia, dando algunas aproximaciones Moises cuando fue desterrado de Egipto tenia aprox. 40 años, otros 40 años estuvo en el desierto y regreso a Egipto con el mandato de Dios a liberar a su pueblo mas o menos entonces tenia 90 años cuando paso el mar Rojo, por lo cual Miriam que era la hermana mayor de Moises tenia aproximadamente 100 años, entonces te puedo decir con seguridad que no hay edad para dejar de ser parte de este ministerio.

En este tiempo ese Dios que estaba con Israel es el mismo que esta ahora con nosotros asi quien es el que sigue haciendo milagros para nuestras vidas hoy en día, por lo que nosotros como sus hijos tenemos un motivo mas para danzar.